Parece simple definirla y lo es. Lo que no resulta simple es el  irrestricto incumplimiento de la “selección de los mejores” a partir de  elecciones en donde todos debieran opinar en relación a quienes son los que están en mejores condiciones para gobernar.

Si nosotros tuviéramos en claro algunos conceptos en cuanto al  valor que tienen esas afirmaciones desde el creador griego Solón, quizá podríamos entender que la práctica de casi todos los políticos, ha desfigurado las ideas, cuando se presentan individualmente y dicen voy a ser tal cosa o quiero ser…

La selección de los mejores no se logra en la urna oficial en donde todos participan, porque ahí ya está todo cocinado.

 La selección en una democracia verdadera está en la célula principal que son los partidos políticos  que para disponer sobre estas cuestiones, se esconden, no existen porque en ellos mismos, o por ellos mismos se destruye o desnaturaliza el sistema. Cómo se pude admitir a los que nadie  ha preseleccionado, por decirlo de alguna manera y aparecen públicamente diciendo yo soy candidato ante muchos que no los  conocen, o los “conocen demasiado”.

Pero más grave es cuando los dueños del poder se eligen solos y no abandonan el interés  que tienen en gobernar eternamente  a partir de esa auto selección arbitraria, espuria, permaneciendo siempre con los mismos grupos que deciden a espaldas del pueblo.

A los que se eligen solos  no hay que votarlos y a los adláteres que los apoyan menos. Hay que concientizar con esta idea para que terminemos con aquello de que no tenemos buenos gobiernos, porque al admitir esos excesos dictatoriales, somos partícipes a la hora de  introducir el voto en una Urna “cargada por ellos mismos antes de empezar.

Esta es la idea, es decir, es la única manera de que  los más capaces y los más honestos puedan tener cabida en las preselecciones y entonces en el momento más importante del cuarto oscuro, no tendrán al frente la mafia que los excluye.

Ante un pueblo que los excluye cuando no advierte estas irregularidades democráticas es bueno que se busquen los caminos para que el dueño del poder: “El pueblo” comience a despertar y entonces ya esté en condiciones para imponerse y decir a gritos: NO, ala auto selección política ilegal.